¿Por qué los líderes tardan en adoptar nuevas tecnologías?
La resistencia a la tecnología rara vez proviene de que las personas no reconozcan su valor. Más bien, responde a temores profundamente humanos.
En el mejor de los casos, los líderes han llegado a donde están dominando su área, basando su éxito en conocer a profundidad su industria, su oficio o su área de especialidad.
Con cada vez más empresas abrazando la automatización y el uso de Inteligencia Artificial, las brechas entre quienes abracen la innovación y quienes no se ensanchará más y más. A pesar de eso, ¿cuántos líderes hay que todavía no adoptan las nuevas tendencias?
Existen barreras clave que frenan esta adopción:
- Miedo a perder autoridad: La tecnología modifica lo que es relevante y cambia cómo se hacen las cosas, lo que puede hacer que los líderes sientan que su conocimiento adquirido con tanto esfuerzo pierde valor.
- Amenaza a su imagen: En la cultura de liderazgo tradicional, reconocer la falta de conocimiento puede percibirse como debilidad. Más aún cuando los líderes dirigen personas con más especialización en un software, metodología o campo.
- Falta de tiempo: Las responsabilidades y presiones del día a día dificultan que los líderes se dediquen al desarrollo personal o a aprender nuevas tecnologías. Para muchos, no parecen haber suficientes horas en el día.
- Distancia de los retos operativos: Los líderes, en particular los altos directivos, suelen estar alejados de los desafíos diarios que la tecnología busca resolver. Además, la complejidad y variedad de las operaciones empresariales modernas hacen que sea más difícil para cualquier directivo conocerlas a fondo.
- Miedo a la automatización: Si bien muchas actividades pueden ser automatizadas, el liderazgo no puede serlo. Sin embargo, algunos líderes temen que adoptar tecnología con demasiada eficacia pueda hacer su rol menos necesario.
¿Cómo sobrellevar el cambio?
Cada empresa tiene su propia cultura organizacional, pero en un mercado laboral que progresivamente valora la adaptabilidad sobre el conocimiento de nicho, el líder de hoy necesita ser el más atento al cambio. Así es como pueden lograrlo:
- Cultivar una cultura de aprendizaje continuo: Fomentar un entorno donde el aprendizaje sea valorado en todos los niveles, incluyendo el liderazgo.
- Fomentar la empatía y la cercanía con los equipos: Los líderes deben interactuar con sus equipos para comprender mejor los retos que enfrentan y cómo la tecnología puede ayudar.
- Ofrecer entrenamiento especializado: Programas de formación confidencial que combinen habilidades técnicas y de liderazgo pueden facilitar una transición más fluida.
- Reforzar el liderazgo adaptable: Promover el valor del liderazgo vulnerable, donde admitir la necesidad de aprender no se vea como una debilidad, sino como una fortaleza.
En estos años decir “innovación” no tiene nada de nuevo. Todo el mundo y su abuela están “innovando”. El verdadero desafío de los líderes de hoy es lograr el delicado equilibrio entre estar abiertos al cambio y las nuevas oportunidades, sin por ello dejar de construir las estructuras sólidas y duraderas que permiten a las organizaciones crecer.
Innovar es fácil, construir sobre las innovaciones es el reto.
Emilio Palomino
Socio COO SutilMind, amigo en Simple Sync.
Why is it so difficult for leaders to embrace new technologies?
Unlike popular opinion, resistance to technology rarely stems from a failure to recognize its value. Rather, it arises from deeply human emotions.
At their best, leaders have reached their positions by mastering their field, building success on a deep understanding of their industry, craft, or area of expertise. Yet, as more and more businesses embrace automation and artificial intelligence, the gap between those who adopt innovation and those who don´t will only widen. Despite this, many leaders still find it difficult to embrace new trends.
Several key barriers contribute to this hesitation:
- Fear of Losing Authority: Technology changes what is relevant and reshapes processes. This can naturally cause leaders to fear that their hard-earned knowledge may lose its hard-earned value.
- Threat to Their Image: In traditional leadership cultures, admitting a lack of knowledge can be seen as weakness—especially when leading teams with more specialized skills in certain software, methodologies, or fields.
- Lack of Time: Daily responsibilities and pressures leave little room for leaders to focus on personal development or learning new technologies. For many, there simply don´t seem to be enough hours in the day.
- Distance from Operational Challenges: Senior leaders, especially in upper management, are often removed from the day-to-day challenges that technology aims to solve. The complexity and scope of modern business operations make it harder for any one leader to understand them in detail.
- Fear of Automation: While many tasks can be automated, leadership itself cannot. Still, some leaders worry that embracing technology too effectively might make their roles seem less indispensable.
How to Embrace Change
Each company has, of course, its own organizational culture, but in a labor market that increasingly values adaptability over niche expertise, today’s leaders need to be the most attuned to change. Here’s how they can succeed:
- Cultivate a Culture of Continuous Learning: Create an environment where learning is valued at all levels, including at the leadership level.
- Foster Empathy and Connection with Teams: Leaders must engage with their teams to better understand the challenges they face and how technology can help address those issues.
- Provide Specialized Training: Confidential training programs that combine both technical and leadership skills can help smooth the transition for leaders.
- Reinforce Adaptable Leadership: Promote the value of vulnerable leadership, where admitting the need to learn is seen not as a weakness, but as a strength.
In recent years, simply talking about “innovation” is nothing new. Everyone and their mother are “innovating.” The main difficulty for today’s leaders is often to strike the delicate balance between being open to change and new opportunities while continuing to build the solid, lasting structures that allow organizations to grow.
Innovating is easy; building on those innovations is the true challenge.